La Secretaría de Relaciones Exteriores informó que una de las condiciones para que el capo narco sea trasladado a Estados Unidos para ser enjuiciado fue una garantía en la que no impondrá la pena de muerte al extraditado, y en caso de ser impuesta, ésta no será ejecutada.
Además, y de conformidad con la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares, el consulado de México en Nueva York procederá a otorgar asistencia a Guzmán Loera, indicó SRE.
También puntualizó la cancillería que el gobierno estadunidense presentó la solicitud conforme al tratado de extradición vigente entre los dos países y en virtud de que existe un proceso abierto en contra del acusado en la corte federal de distrito para el este de Nueva York.
Por su parte, Joaquín Guzmán Loera se declaró ayer inocente de 17 cargos que se le imputan en un tribunal federal de Brooklyn, que busca sancionarlo y recuperar parte de los 14 mil millones de dólares que consideran obtuvo como ganancia por introducir droga a Estados Unidos en las pasadas tres décadas.
Con un gran despliegue de seguridad a su alrededor el Chapo estuvo tranquilo en los diez minutos que duró su declaración, con ayuda de interprete, frente a jueces y fiscales.
El Chapo permanecerá detenido, sin derecho a fianza, en una prisión donde han estado sospechosos de terrorismo y mafiosos. «Les garantizo que nadie podrá cavar un túnel en el baño», declaró Ángel Meléndez, uno de los agentes a cargo del caso. Dijo también que cuando llegó a territorio de Estados Unidos desde Ciudad Juárez “en sus ojos se podía leer la sorpresa, el shock y, en cierto modo, también el miedo”.
Con información de La Jornada
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