La agencia estatal rusa TASS, reportó que expertos rusos y egipcios, no hallaron señal de trauma relacionado con explosión en cuerpos de víctimas. Sin embargo, no elimina la posibilidad de que la caída del avión se haya producido por una explosión.
Aún se desconocen las causas de la tragedia del Airbus A-321 de la rusa Kogalymavia (Metrojet), que cayó en el Sinaí con 224 pasajeros. Se espera que las cajas negras puedan proporcionar pruebas determinantes sobre el incidente.
Algunos investigadores trabajan sobre la pista de la cola del avión que fue encontrada a cinco kilómetros de distancia de los restos. Se especula que una reparación de esa zona del avión pueda ser la clave del accidente.
Con información de CNN
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