Habitantes de un municipio en Monterrey, Nuevo León, encontraron a un oso colgado sobre un árbol. Lo que más les preocupó es que estaba cerca de una zona escolar.
Después de bajar del árbol, el osito negro decidió echarse a correr por las calles. Algunos de los vecinos tomaron fotos y videos que no dudaron en subir a redes sociales.
Afortunadamente, Protección Civil, Parques y Vida Silvestre de Nuevo León y PROFEPA, lograron capturarlo tras suministrarle un sedante.
De acuerdo con los vecinos, es la primera vez que se ve un oso negro por la zona, por lo que están extrañados, pues no hay cerca alguna hábitat natural como para que baje a esta colonia a buscar comida.
Al ser una especie en peligro de extinción, la PROFEPA y Parque Vida Silvestre de Nuevo León deberán seguir el protocolo para regresarlo de manera segura. Se dice que el oso recorrió, aproximadamente, 2.3 kilómetros desde el cause del Río la Silla, hasta la colonia Buenos Aires.
