La defensa de Luiz Inácio Lula da Silva pidió una medida cautelar al Comité de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra para intentar impedir el arresto del ex presidente de Brasil. El pedido reclama que el Gobierno brasileño impida el encarcelamiento de Lula hasta que se agoten todos los recursos jurídicos disponibles en el caso de la condena a 12 años de cárcel por corrupción contra el ex presidente.
Según la orden del juez Moro Lula tenía plazo hasta las 17 horas de ayer para entregarse voluntariamente a la Policía en la sureña ciudad de Curitiba, después de que la Corte Suprema negase al ex presidente un recurso de habeas corpus para evitar una orden de arresto.
La defensa de Lula presentó hoy además un nuevo recurso especial de habeas corpus ante la segunda corte del país, el Superior Tribunal de Justicia (STJ), para intentar frenar el inminente ingreso a prisión.
Lula, favorito para las elecciones del 7 de octubre, se encontraba hoy en la sede del Sindicato de los Metalúrgicos de Sao Paulo, su bastión político desde sus años como líder sindical. Aún no se ha entregado y cientos de seguidores del ex presidente se congregan delante de la sede del sindicato para respaldar a Lula, ícono de la izquierda latinoamericana por los éxitos de sus Gobiernos entre 2003 y 2010.
Lula además pidió tiempo para celebrar la misa de su esposa, Marisa Leticia, fallecida en febrero del año pasado y que hoy cumpliría años.
Con información de La Jornada
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