Autoridades federales y estatales confirmaron un saldo de seis muertos y al menos noventa heridos por disturbios que tuvieron lugar en diferentes puntos de Oaxaca, principalmente en Nochixtlán, entre policías federales y maestros opositores a la Reforma Educativa.
El enfrentamiento comenzó a primeras horas de la mañana de este domingo 19 de junio, con un desalojo violento llevado acabo por policías federales, de acuerdo con reportes de diversos medios y pobladores.
Frente a disparos y gases lacrimógenos, los maestros comenzaron a atrincherarse y se armaron de piedras, palos, barricadas y quema de vehículos para impedir el avance de las fuerzas federales. Al medio día, el enfrentamiento se puso más violento, pues las fuerzas federales comenzaron a disparar sus armas en contra de los civiles, dejando un saldo de seis personas muertas, quienes han sido identificados por la CNTE como:
1.- Andrés Aguilar Sanabria de 23 años de edad.
2.- Yalid Jimenez Santiago de 29 años de edad.
3.- Óscar Nicolás Santiago de 22 años de edad.
4.- Anselmo Cruz Aquino
5.- Jesús Cadena de 19 años de edad
6.- Aún por identificar.
Hospitales negaron la atención a civiles y sólo atendían a uniformados, por lo tanto fueron trasladados para ser atendidos a Hacienda Blanca, en donde los doctores recibieron agresiones con gases lacrimógenos.
Ante tanta violencia, autoridades federales afirmaron que quienes participaron en el operativo “no se encontraban armados” y que “las detonaciones provenían de personas ajenas, tratando de dar una versión manipulada de los hechos, sin embargo el trabajo de periodistas de Proceso, La Jornada, The Associated Press y Noticias Oaxaca, desmintieron la versión oficial, evidenciando la represión y el abuso por parte de la autoridad.
En conferencia de prensa, Gabino Cué, el gobernador, señalo como actos desmesurados los que ha vivido Oaxaca los últimos 35 días.
Acompañado por el Comisionado General de la Policía Federal, Enrique Galindo, reveló que grupos radicales se infiltraron entre los manifestantes y provocaron el caos, se dio a conocer que en el operativo participaron 800 elementos.
La pregunta que queda en el aire es ¿es necesaria tanta?, si bien existieron actos de la CNTE que no se ajustaron a derechos, tampoco la intervención y asesinato cometido por fuerzas del Estado es defendible. Al igual que lo vivido en Atenco, Tlatlaya y Ayotzinapa, lo sucedido en Oaxaca, es un atentado contra los derechos de las personas por parte del Estado.
Con información de Excélsior
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