Un nuevo escándalo de abuso empaña al deporte estadounidense. Un grupo de cinco porristas (cheerleaders), declararon bajo el anonimato a The New York Times, que fueron víctimas de abuso durante un viaje a Costa Rica, en donde se vieron obligadas a posar topless ante una cámara, y en presencia de los patrocinadores del equipo de fútbol americano al que representaban, los Washington Redskins.
El viaje estaba destinado a una sesión de fotos para el calendario del equipo, apenas llegaron al aeropuerto, les requisaron el pasaporte a todas las mujeres durante su estadía.
Luego de la incómoda sesión fotográfica, los ejecutivos eligieron a nueve, de las 36 chicas para acompañar a los patrocinadores que “querían fiesta”. «Regresen a su habitación y prepárense», les dijo el director. Varias comenzaron a llorar, según el relato del New York Times.
Las féminas aseguran que, a pesar haber sido damas de compañía, no recibieron dinero ni tuvieron sexo con alguno de los empresarios.
Lea el reportaje original de The New York Times aquí
Periodista. Dedicada a la producción de material multimedia periodístico.