Luego de su aprehensión, el 13 de marzo de 2013, Elba Esther Gordillo presentó documentos para comprobar que su riqueza la heredó de su madre.
Alfredo Bazúa Witte, Notario 230 de la Ciudad de México, fue quien entregó una copia del testamento de la madre de Gordillo a Juan Áyax Fuentes Mendoza, fiscal de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) responsable de las pesquisas.
En dicho documento, presuntamente, Zoila Estela Morales Ochoa, quien falleció en 2009, heredó a su hija una fortuna de más de 373 millones de pesos en arte, bienes muebles e inmuebles, empresas y hasta cantidades millonarias de dinero en efectivo.
Morales Ochoa fue una maestra rural en comunidades indígenas de Chiapas, pese a que la herencia que dejó a la exdirigente sindical la haga parecer como una corredora inmobiliaria y millonaria coleccionista de arte.
Aunque la madre de Gordillo murió el 23 de junio de 2009 en la Ciudad de México,dejó escrito su testamento desde el 14 de agosto de 1996, en el que incluyó los retratos de su propia hija como el óleo sobre tela de Elba Esther y Rigoberta Menchú, pintado por Gutiérrez Castrejón, y el Retrato de la exlideresa magisterial de Vicky Montesinos.
La herencia también incluye 143 millones 750 mil pesos en efectivo; un paquete accionario de Comercializadora TTS de México; el capital fijo y sus acciones de Inmobiliaria Galilei, Comercializadora Erizpe e Inmobiliaria Larcaste, estás últimas con un valor comercial de 185.6 millones de pesos.
Cabe destacar que el valor de las empresas fue dictaminado el 24 de noviembre de 2011 por el entonces Corredor Público número 35 de la Ciudad de México, Salomón Vargas García, quien además valuó a precios inflados los terrenos en Campeche que fueron utilizados por testaferros de Javier Duarte para lavar dinero desviado del erario.
Vargas García falleció en mayo de 2015 en forma accidental, informó el diario Reforma.
Además, Gordillo heredó la empresa Comercializadora TTS, de un valor comercial de 40.6 millones de pesos, y con la que en 2010 la maestra adquirió dos residencias en San Diego, California.
Asimismo, heredó más de 200 pinturas, esculturas, grabados, litografías, jarrones, muebles de autor y coloniales que incluyen a artista como Diego Rivera, Rufino Tamayo, Alfredo Zalce, Sebastián, Francisco Zúñiga y Francisco Toledo, entre otros.
Con información de MientrasTanto
