Dos alcaldes fueron atacados este viernes por la mañana en dos Estados del país: en Colima, al oeste, y en su vecino Michoacán. El primer edil, Crispín Gutiérrez, del municipio de Ixtlahuacán, fue asesinado cuando circulaba por una autopista. El segundo, José Misael González, de la localidad de Coalcomán, se encuentra estable tras el tiroteo, pero uno de sus escoltas está gravemente herido en un hospital de Morelia, la capital estatal. Con Gutiérrez, suman ya tres presidentes municipales liquidados en lo que va de octubre en todo el país, según informó el Gobierno regional.
La fiscalía local ha confirmado en un comunicado que Gutiérrez «circulaba por la autopista Manzanillo-Guadalajara» cuando fue agredido.
El alcalde asesinado pertenecía al oficialista PRI y gobernaba la localidad de Ixtlahuacán, de unos 4.700 habitantes, desde el 2015. Previamente había sido diputado del Congreso de Colima, un Estado gobernado por el también priista José Ignacio Peralta.
También en la mañana del viernes, en el vecino Estado de Michoacán, el edil de Coalcomán, a unos 150 kilómetros de Ixtlahuacán, fue atacado a balazos por un grupo armado que le esperaba, cerca del cementerio del municipio, cuando se dirigía a una empresa trituradora de su propiedad. González es miembro PRD y pasó de ser líder de las autodefensas (grupo de civiles armados creado para protegerse del crimen organizado), para combatir al cartel de Los Caballeros Templarios, en Coalcomán a presidente municipal.
Además de Gutiérrez, los otros dos alcaldes asesinados fueron: Stalin Sánchez, alcalde de Paracho, también en Michoacán, el sábado siete; y el edil de Huitzilan de Serdán, en el Estado de Puebla, Manuel Hernández, quien fue asesinado junto con su escolta en una carretera el martes 10. Desde 2003, casi medio centenar de alcaldes han sido asesinados en México, según la Asociación Nacional de Alcaldes.
Con información de El País
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